miércoles, 11 de julio de 2018

ESPINACAS A LA CREMA

No se por que razón tenía yo la espinaca bastante olvidada y eso que de pequeña me empapuzaron de esa verdura mientras me explicaban los cuentos de Popeye. Y razón tenían al dármela pues pocas verduras son tan beneficiosas para nuestro organismo como la espinaca.
                          Resultado de imagen de fotos de popeye

Ayer preparé un plato que en casa a todos no gusto mucho. Os he de reconocer que compré las espinacas congeladas y no sólo eso si no las que ya vienen en una bolsa con pasas y piñones. La verdad es que estaban muy buenas.

Ingredientes: (para dos personas)

Un paquete de espinacas congeladas con  pasas y piñones
150 gr. de gambas peladas
2 huevos
Crema de leche
Sal y pimienta

Elaboración:

En una sartén tipo wok con un pelin de aceite rehogar bien las espinacas. Mientras en otra sartén hacer dos huevos fritos.

De como hacer  huevo frito habría mucho que escribir, ya que a cada uno nos gusta de una manera diferente, pero en este caso hacer los huevos, de uno en uno en  aceite tibio (al echarlos) y no hacer demasiado.

A continuación freímos ligeramente las gambas.

Añadimos los huevos que cortaremos en trocitos sobre las mismas espinacas  y también las gambas, daremos unas vueltas, añadiremos crema de leche hasta obtener la cremosidad deseada y nuestro plato está listo para servir a la mesa.



Con esta masa rellene el otro día unas empanadillas caseras que quedaron muy apetitosas

Nota: Se puede sustituir la crema de leche por queso cremoso.

Fuente: Familiar

5 comentarios:

CHARO dijo...

pues te copio la receta, porque esta manera de hacer las espinacas a la crema es bastante más ligera que otras que he visto

Marta dijo...

Unas espinacas ricas , ricas y deliciosas, seguro. Las probaré.
Besitos preciosa.

Cuca dijo...

¡Pues a mí me han encantado! Lo mío con las espinacas es amor espontáneo. En casa de mis padres acelgas, espinacas o collejas no se hacían nunca, salvo las collejas cuando mi padre las traía del campo pero se las comía él solo.

¿La razón? a mi madre no le sientan bien y por tanto ni siquiera nos las daba a nosotros.

Debo ser la única niña que pidió comer espinacas en su vida, porque yo le insistía mucho a mi madre con ocho o diez años que quería comerlas y ella respondía que no me iban a gustar. Tanto insistí que un día por callarme me las hizo, me las comí toditas y a partir de ahí ha sido amor para siempre.

Yo las compro muchas veces congeladas. No siempre se tiene tiempo de arreglarlas y en muchas ocasiones son más baratas que frescas así que no veo el inconveniente.

Sí que estoy cansada, el verano me agota bastante, pero en unas semanas estoy on fire

¡Besos mil!

lolines dijo...

Muy sabrosas estas espinacas y muy buena idea de aprovechamiento
Saludos

Nenalinda dijo...

A mi hijo y a mi nos encantan las espinacas ,y son habituales en nuestras cenas ,nunca las habia visto con pasas y piñones me fijare la proxima vez que vaya al super seguro que le van de miedo, ese plato se ve divinisimooooooo.
Una idea fantastica el usar lo que te quedo para hacer empanadillas uummmmmm seguro estaban de viciuuuus.
Muchas gracias por pasarte a comentar por el blog ,un placer venir a visitarte.
Bicos mil y feliz finde wapa.