domingo, 27 de diciembre de 2009

Cena Gallega

(Como veis en la foto, a la cena también asistió una meiga)

Hace unos días celebramos la Navidad con unos amigos haciendo una cena gallega, ya que todos de una forma u otra estamos vinculados al Camino.
Empezamos con unas ostras, que por cierto no eran gallegas eran de Arcachon, las trajeron unos de nuestros amigos que viven en Francia, muy cerca de ese lugar, estaban buenísimas.



La cena consistió en un Caldo Gallego, servido en mi fantástica olla menorquina, regalo de Celes de sal y azucar ,mi AIG 2009, ¿a que queda preciosa?. Seguimos con un pulpo con cachelos, una empanada de atún, unos padrones y unos berberechos. De postre Tarta de
Santiago, queso de Arzua y Tetilla gallega, todo regado con un Albariño fresquito.
Para hacer todos estos platos tuve que recurrir a Pilar de lacocinadelechuza, y gracias a sus buenos consejos puedo decir que la cena triunfó. Además, atención para las de Barcelona, si


queréis hacer el Caldo, en las payesas que están a la salida por la izquierda del Mercado de la Boquería (mirando a las Ramblas), los encontraréis y las patatas gallegas en bolsas en el Súper del Corte Inglés.
Bueno, os voy a dejar la receta del Caldo Gallego de Aurea, una cariñosa gallega de Sarria, que trabajó durante muchos años en casa de mi suegra, cuando mi marido y sus hermanos eran pequeños. Cada vez que iba al pueblo por lo visto, volvía cargada de embutidos, unto, alubias...., con los que preparaba el caldo Gallego. Esta era su receta y tal cual os la transmito.
Pero antes un detallito para Celes y Pilar. Esta foto es la que dedico a todos aquellos blogs de los que copio alguna receta o a aquellos amigos bloggeros que me ayudan de una u otra forma, Celes, Pilar, si os apetece la podéis llevar a vuestro blog y muchas gracias.
Aunque claro si es por lo que aprendo de los blogs os la tendría que dar a todos, pues de todos vosotros aprendo y con todos vuestros blogs disfruto un montón.

Ingredientes para 8 personas:
2 huesos de jamón
2 huesos de espinazo
2 trozos de costilla de cerdo
2 trocitos de tocino salado
1 trocito de morcillo


250 gr. de alubias (me las traje de Santiago)
2 platos de patatas mal cortadas
Un trozo de unto (segí en catalán, y rancio según Aurea), algo más grande que una avellana, pasado por harina, para que no se deshaga.
Un buen manojo de grelos
Sal y pimentón

Elaboración:
La víspera poner las alubias a remojar.
Iniciar el caldo, poniendo una olla con abundante agua fría al fuego, echarle todas las carnes, las alubias y al empezar a hervir el unto, al que habremos incorporado un poco de pimentón y pasado por harina.
Dejamos hervir hora y media, espumando de vez en cuando. Mientras, lavamos, cortamos y escaldamos los grelos para que pierdan un poco el amargor.
Pasada la hora y media, echamos las patatas al caldo, después de quince minutos añadimos los grelos ya escaldados y escurridos, dejamos cocer hasta que todo este blandito, media hora aproximadamente.
Se sacan los huesos, el tocino y la carne, si se quiere esta última se puede añadir desmenuzada al caldo.
Salar al final, después de probarlo.

Servir muy caliente
Nota: Si el caldo quedase más claro de la consistencia deseada, se pueden sacar unas pocas alubias y patatas, se trituran y se vuelven a añadir a la olla, removiendo bien el contenido.
Fuente: Aurea

miércoles, 16 de diciembre de 2009

SORPRESA DE HUEVO CON CARNE PICADA AL AROMA DE PIQUILLOS


Estos días, supongo que como todos, voy muy, muy ajetreada y apenas me queda el tiempo que desearía para cocinar, fotografiar, probar y publicar, aunque si saco el tiempo de donde puedo para pasearme por vuestros blogs y sacar ideas para las próximas fiestas, y la verdad es que he sacado muchas ideas y muy buenas.


Ayer tuve unos amigos a cenar y preparé esta "Sorpresa", saque la receta de la Revista Lecturas Cocina de Navidad, que os recomiendo, pues tiene recetas variadas para estos días, con diferentes grados de dificultad. La cena de ayer no era festiva, era una simple y agradable reunión de amigos, por lo que opté por hacer este plato, acompañando a una crema de calabaza muy calentita, que con el frío que hace se agradece.


Hice la receta tal como explica la revista y de mi cosecha para que quedase un plato más jugoso, añadí los piquillos. Vamos a por ella:


Ingredientes:
4 huevos + 1huevo

400 gr. de carne picada de cerdo (yo puse mezcla ternera, cerdo)

2 yemas de huevo

sal y pimienta negra recién molida

50 gr. de harina

Aceite de oliva

Pan rallado


Para la crema de piquillos:


Un tarro de pimientos del piquillo

Media cebolla

2 tomates rallados

1 diente de ajo

Aceite y sal


Elaboración:


Disponer los cuatro huevos en un cazo con agua ligeramente salada. Llevar a ebullición y cocer durante 10 minutos. Enfriar bajo el agua del grifo y pelar.


Colocar la carne picada en un cuenco, agregar las dos yemas de huevo, dos cucharadas de harina y una pizca de sal y pimienta. Remover bien. Enharinar la superficie del mármol de cocina, y con ayuda de un rodillo estirar bien la masa de carne.

Cortar la pasta en cuatro partes iguales. Colocar en el centro de cada trozo un huevo duro y formar una bola. Batir el huevo restante y añadirle una cucharada de aceite de oliva. Pasar las bolas de huevo por la harina, después por el huevo batido y por último por el pan rallado.


Mientras preparar la crema de piquillos:


Preparar un sofrito con la cebolla el tomate y el ajito, ya fuera del fuego añadirle los pimientos del piquillo troceados y sin pepitas y pasarlos por la batidora para conseguir una crema suave. Reservar.


Poner una sartén al fuego con aceite y cuando esté muy caliente, freír los huevos empanados. Dejarlos escurrir sobre un papel absorbente de cocina.

Partir los huevos empanados por la mitad. Podéis servirlos acompañados de la crema de piquillos, o bien sacar las medias yemas y mezclarlas con un poco de crema rellenando después las mitades.

Nota: En la receta original pone que se introduzcan en la nevera durante una hora, supongo que para cortarlos mejor, yo los corté con mucho cuidado y los serví inmediatamente para evitar que se resecasen y se enfriaran.

Fuente: Revista Lecturas Cocina de Navidad, pag. 78

lunes, 7 de diciembre de 2009

GARBANZOS CON ESPINACAS, GAMBAS Y VIEIRAS


El viernes estuvimos con unos buenos amigos cenando en un restaurante en Sant Cugat del Valles, población cercana a Barcelona. El restaurante es el "Matilda" , está instalado en una antigua iglesia, de la que se conservan la estructura y las bóvedas que llegan a tener hasta doce metros de altura, es amplio y a la vez acogedor, y en la decoración se han utilizado numerosos elementos modernistas que crean un ambiente acorde con el edificio.

La verdad es que la cena estuvo muy bien, tanto los entrantes como los platos, y los postres, pero querría destacar uno que me gustó por su sencillez y la mezcla de ingredientes: Garbanzos con espinacas, gambas y vieiras.

A continuación os dejo la receta, tal y como yo la he interpretado, no pongo cantidades ya que yo he hecho las proporciones a ojo, aunque lo que prevalecía en el plato eran los garbanzos.

Ingredientes:

Garbanzos ya hervidos de buena calidad (esto es básico)
Espinacas
Gambas peladas
Vieiras
Ajos, perejil, aceite, sal

Elaboración:

Hervir las espinacas con sal, escurrir y reservar.
Picar los ajos y el perejil, cuando los ajos empiecen a dorarse y con el fuego muy fuerte y el aceite muy caliente, incorporar las gambas y las vieiras, hasta que estén en su punto (es decir poco hechas).
Mientras, nos aseguraremos de que los garbanzos estén blandos, dándoles un hervor si fuera preciso.

Con todos los elementos muy calientes emplatar, ayudándonos de un aro, poner una capa de espinacas, otra de garbanzos, otra de espinacas y encima terminar con las vieiras y las gambas.

(Foto tomada de Google)

Al salir del restaurante nos acercamos a admirar el impresionante monasterio que está a pocos metros de allí, para los que no lo conozcáis, os transcribo lo que de él dice Wikipedia:

“El monasterio de Sant Cugat es una antigua abadía benedictina situada
en la localidad catalana de Sant Cugat del Valles.

(Foto tomada de Google)
El monasterio, construido en el siglo IX, destaca por su impresionante claustro. Fue el monasterio de mayor importancia de todo el Condado de Barcelona….”

Nota: Repito, ni la receta ni la presentación son las del Restaurante, si no una interpretación que yo he hecho para mostrárosla
Inspiración: Restaurente Matilda