viernes, 23 de julio de 2010

"BOULES DE PICOLAT"


Ayer por la mañana salimos en busca de flores, para prensar y para secar. Los prados parecen

alfombras multicolores, y es que este año todo viene muy retrasado, supongo que como en cualquier lugar de España. Comenzamos a caminar y para nuestra sorpresa, empezamos a encontrar “carmanyolas”, “camasecs”, “moixernons”, senderuelas, o como se denominen en los diferentes lugares (n.c.: marasmius oreades).

Enseguida cesó nuestro interés por las flores, y nos concentramos en encontrar “corros de brujas”. Para los que no sepáis lo que son estos corros, os diré que se llama así a unos círculos en los que la hierba es de un verde algo más oscuro y por los que avanzan los micelios de las “carmanyolas”, y que en época de setas sobre estos micelios es donde se pueden encontrar fácilmente y en cantidad.

Encontramos unos pocos “corros de brujas”. Gracias a las lluvias recientes, en algunos corros amparados del calor por la hierba más alta de lo habitual, pudimos recoger algo más de un kilo de las famosas setas. También hay que decir, que lo que en plena época de recolecta nos hubiera llevado una escasa media hora, ayer nos ocupó casi toda la mañana.

Pero regresamos a casa satisfechos con nuestras setas. Enseguida me dediqué a limpiarlas, y freírlas, la mitad las congelé y con la otra mitad, decidí hacer unas “Boules de picolat”, que es como por esta zona llaman a las albóndigas.

Receta de las “Boules

Elaboración

1 K. de carne picada, mitad cerdo, mitad ternera

Unas hojitas de perejil muy picado

Un diente de ajo triturado (opcional)

Media rebanada de pan de molde bañado en leche y escurrido

Un huevo ligeramente batido

Sal y pimienta

Harina

5 zanahorias

Un bote de aceitunas negras sin hueso

Medio kilo de “Carmanyolas

Para la salsa

1 tomate grande maduro

1 cebolla picada

Sal

Aceite

1 cucharadita de café de Maizena disuelta en un poco de agua fría.

Elaboración:

Mezclar la carne picada con el perejil, el huevo, el ajo el huevo y el pan , añadir sal y pimienta y amasar formando las bolas. Pasar éstas por harina, freírlas en abundante aceite muy caliente, escurrir sobre papel de cocina y reservar.

Hacer el sofrito con el tomate y la cebolla, freírlo a fuego lento, revolviendo de vez en cuando. Es importante que esté muy hechito. Una vez terminado triturarlo con la batidora.

En un wok o sartén honda poner el sofrito, la maizena ya disuelta, un vaso de agua, las bolas de carne, las aceitunas y las zanahorias peladas y partidas en discos, dejar cocer a fuego lento hasta que las zanahorias estén tiernas, (si es necesario añadir más agua). Unos diez minutos antes de terminar incorporar las “carmanyolas”, rectificar de sal y pimienta y listo para llevar a la mesa.

Nota: Al hacer el sofrito es aconsejable hacer más cantidad, pues el trabajo es prácticamente el mismo, y así el que no vayamos a utilizar lo podemos congelar en pequeños recipientes, y así tenerlo a punto para otros guisos. Y en este caso realmente es cierto aquello de "El secreto está en la salsa", ja, ja...

Fuente: Cocina de La Cerdaña

martes, 6 de julio de 2010

COLOR EN LA ENSALADA

He estado mucho tiempo ausente debido a problemas de conexión con Internet, ya que donde estaba apenas tenía cobertura, por eso ni siquiera pude despedirme de todos vosotros, pero ahora espero ponerme al día de todo lo que me he perdido en este tiempo.

Con estos calores apetecen comidas fresquitas, por lo que en estos días estoy preparando casi a diario ensaladas y aunque nos encantan las típicas de lechuga tomate, pepino, atún…, de vez en cuando intento variar. Esta que os presento hoy la he copiado de una revista francesa y aunque en principio no estaba muy convencida, el resultado ha sido un éxito, fresca, saludable, y llena de color. Vamos con la receta:

Ingredientes:

200 gramos de surimi de buena calidad

1 naranja

2 nectarinas

100 gr. de zanahorias

1 melocotón

El zumo de un limón

3 cucharadas de aceite de oliva, sal y pimienta

Para decorar unas hojitas de menta fresca, grosellas, fresitas


Elaboración:

Cortar la naranja a dados, las nectarinas en finos bastones, las zanahorias en láminas finísimas y el melocotón en medias lunas también muy finas.

Colocar todos estos ingredientes en una ensaladera, adirle el surimi cortado a trocitos, a continuación mezclar. Añadir el zumo del limón, salpimentar ligeramente y colocar en la nevera; debe estar muy frío. En el momento de servir mezclar de nuevo añadiendo el aceite, los frutos silvestres y la menta para terminar la decoración.

¡Listo para llevar a la mesa!

Nota: A pesar de ser una ensalada básicamente de frutas es un buen comienzo para una comida de verano

Fuente: La revista “Cuisinons, les saveurs retrouvées”, con alguna pequeña variación.